Más de 16 años al servicio del atletismo haciendo lo que más le gusta. Chema Martínez se pasó casi dos décadas desgastando el asfalto de las calles y las pistas de los estadios de todo el planeta para intentar cumplir sus sueños y hacer volar a los aficionados con sus éxitos. Hoy lo sigue haciendo, como un runner más.
Su familia ha sido siempre su gran pilar. “Ellos me abrieron el camino”, ha llegado a decir en alguna ocasión David Ferrer. Y es que Pilar y Jaime, sus padres, le introdujeron a él y a su hermano Javier en el mundo del tenis.